Nueva entrega de la colección de comentarios que el propio Joaquín Díaz está realizando, en exclusiva para nuestro blog, sobre todos sus trabajos discográficos. Publicamos hoy el correspondiente a “Joaquín Díaz / Ignacio Sáenz de Tejada / Álex Kirschner” (1973), disco censurado y que no llegó a ser publicado, incluido también en su ficha (pincha aquí para acceder).
Os recuerdo que también podéis acceder a él mediante la entrada correspondiente de la categoría “Joaquín comenta su obra” (pincha aquí).
Durante los años en que me encargué de editar el repertorio internacional de Movieplay, tuve ocasión de recibir y escuchar infinidad de discos que, o bien eran muestras de diferentes discográficas que ofrecían sus artistas para que fuesen publicados sus repertorios en España, o bien eran LP´s que llegaban a las oficinas del sello en la Avenida de América procedentes de lo que entonces se llamaban A&R managers, o sea agentes de artistas y repertorio, que pretendían dar a conocer a sus pupilos.
Uno de aquellos discos, titulado The Sweeney´s Men, venía avalado por la discográfica Transatlantic Records y reunía más de diez canciones de una banda irlandesa recién estrenada cuyos miembros, Johnny Moynihan, Andy Irvine and ‘Galway Joe’ Dolan, procedían de diferentes formaciones anteriores o habían acompañado a otros músicos como los Clancy Brothers. La fórmula me pareció adecuada para adaptarla a un formato español que estábamos probando Alex Kirschner (de Almas Humildes), Ignacio Sáenz de Tejada (de Nuestro Pequeño Mundo) y yo, y que solo habíamos contrastado una vez en un teatro de Valladolid aunque con notable éxito.
Hablé con Carlos Guitart, que era el responsable del repertorio español en la compañía y estuvo totalmente de acuerdo en que el experimento podía salir bien. En un momento en que predominaban los grupos numerosos podía aceptarse sin problemas un trío con personalidades de diferentes orígenes. Alex, Nacho y yo nos pusimos a trabajar en serio e incluso nos fuimos a preparar canciones en la finca familiar de Viana de Cega. Tras un intenso fin de semana el disco estaba más o menos preparado y el repertorio seleccionado: canciones del renacimiento, temas tradicionales, romances, y un variado etcétera del que quedamos bastante satisfechos. El disco se grabó en los estudios madrileños de Audiofilm y se encargó del sonido Juan Vinader y de la producción Gonzalo de la Puerta.
Durante los años precedentes tuve mucha e intensa relación con la censura, ya que prácticamente me encargaba de enviar todos los textos de los artistas de Movieplay y en particular -bien revisados y “retocados”- los de aquellos artistas que podían tener algún conflicto de intereses con los censores. La familiaridad de esta relación me traicionó: pensé que las canciones que se grababan eran casi “blancas” y que no ofrecerían ningún obstáculo para la autorización.
Me equivoqué; entre las canciones seleccionadas estaba una especie de cuento cantado “Peio, Peio” (o sea, Pedro Pedro) en el que una joven le pregunta a su esposo si puede irse a la cama porque ya ha terminado de hilar. Pedro le va contestando que le faltan diferentes labores y así la entretiene hasta la madrugada. Nada censurable salvo que en el encabalgamiento de la estrofa repetíamos hasta la saciedad la palabra “eta”, que es “y” en vasco.
La estrofa alarmó al censor a quien intenté tranquilizar con una carta en la que explicaba el origen de la canción, los cancioneros en los que había sido publicada y todo lo que pude recabar sobre la falta de intencionalidad del tema. Al ver que se volvía a repetir la negativa de la censura y preocupado porque el disco ya estaba grabado y prensado, me dirigí a Ricardo de la Cierva, quien me remitió al recién nombrado Director General de Cultura Popular y Espectáculos Jaime Delgado.
Todos mis intentos fueron inútiles, todos mis argumentos desestimados y el disco quedó arrinconado y sin carpeta en los almacenes de Movieplay. Se me dijo que se habían destruido todos los ejemplares -salvo el que me quedé de prueba y que me habían remitido desde Iberofón- y no hubo nada más, salvo la sorna con la que algunos empleados de Movieplay me recordaron que “con la censura, pocas bromas”.
(Joaquín Díaz, Octubre 2016)
Muchas gracias por mantenerme informada sobre la obra de Joaquín Diaz. Saludos fraternos
Gracias a ti, Lucy, por tu cariño y presencia constante. Un fuerte abrazo desde España.