Conferencias sobre el Romancero (Universidad de Cantabria, Julio 2019)

Los días 10 y 11 del pasado mes de julio Joaquín Díaz impartió dos conferencias sobre el romancero para la Universidad de Cantabria, la primera en Laredo y la segunda en la Casona de Tudanca que perteneció a José María de Cossío, autor, junto a Tomás Maza Solano, del Romancero popular de la Montaña (1933).

Fotografía de Paco Manzano

La Casa de Cultura de Laredo registró un lleno absoluto para escuchar a Joaquín referirse a las tradiciones y a un género -el romance- «que ha tenido una importancia vital en la historia de nuestro país». Durante su intervención, titulada «Un paseo por el romancero en Cantabria«, nuestro protagonista habló de la tradición oral y de cómo parte de esa tradición se ha ido perdiendo con la llegada de Internet y de las nuevas tecnologías. Además, durante su disertación no faltaron las referencias al romancero de la montaña o a quiénes han trabajado durante años para que este género no caiga en el olvido. Gracias a la habitual generosidad de Joaquín Díaz podemos acceder a continuación al contenido completo de la conferencia:

Como podemos ver en la fotografía situada sobre estas líneas, Joaquín estuvo acompañado por el director de la sede los Cursos de Verano en Tudanca, Mario Crespo, el ravelista Chema Puente, la responsable de la sede de Laredo, Raquel Gómez, la concejala de Cultura del Ayuntamiento de Laredo, Izaskun Sarabia y  Rodrigo Gómez y Tono Reguera, integrantes de la agrupación folclórica La Jila.

Al día siguiente, 11 de julio, se celebró en la Casona de Tudanca el aniversario del nacimiento del filólogo Ramón Menéndez Pidal, en una nueva edición de los «Encuentros de Tudanca«, actividad que nació hace cuatro años como homenaje a José María de Cossío y sus amistades, además de reivindicación del legado de la Casona de Tudanca, recordando la idea del encuentro y la tertulia en este lugar.

Joaquín Díaz rememoró cómo la figura de Menéndez Pidal ha influido en su obra, ya que fue fundamental para comenzar a investigar, de manera más científica, el romancero y sus fuentes originales. Además, recordó algunas anécdotas de su trayectoria literaria, como es el caso de su primer libro «que se gestó en Santander en un viaje que hice con Pablo Beltrán Heredia y Jesús Aguirre antes de ser duque de Alba. Fuimos de visita a las cuevas de Altamira y me propusieron dar un recital de romances allí mismo». Este es el contenido completo de su conferencia:

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